Consejos para conquistar a un hombre
· Usa tus defectos a tu favor
Las mujeres de hoy, obsesionadas con los ridículos estándares de belleza, a menudo se esfuerzan por alcanzar extrañamente ciertos escalafones de monotonía. Es una pena ver cómo estas copias no reconocen una oportunidad de valerse de las únicas características de su belleza como una forma de destacarse de entre la multitud. ¿Por qué avergonzarte de tu nariz romana? ¿Por qué no usarla como una manera de ser distinta al resto? No estés tan pendiente de esconder tus defectos que termines escondiendo la esencia de tu ser. Muéstrate como eres, con tus defectos al natural, y sumarás un valor agregado inestimable a tu vida.
· No hables con los hombres innecesariamente
Con el tiempo, una mujer puede revelar su verdadero ser a un hombre. En consecuencia, no enloquezcas a tus citas con millones de palabras y datos innecesarios desde un primer momento. Aprende a no tener miedo a los silencios. Otorga la oportunidad al hombre de poder apreciar tus otras cualidades.
· Habla suave (y lleva un buen lápiz labial)
Hay algo que resulta irresistible para muchos hombres, y es que se les hable en voz baja, a sotto voce. Y si es posible, arrastra la letra s en tus frases. Nada más sensual y encantador que el susurro de una mujer. Dado que esta técnica de hablar a voz baja hace que el hombre se acerque para escucharte (y aparte que tu boca se convierta en el centro de la atención), asegúrate de tener tus labios pintados de un color insinuante y llamativo.
· No te burles de los casamenteros
Mantente abierta a las ofertas que te haga tu amigo casamentero, sobre todo cuando éste conozca bien a las dos partes que quiere unir. Para hacer que el encuentro sea del todo provechoso, arregla una cena o un almuerzo —no sólo tragos o café—. Después de todo, una mujer tiene que comer. Y las citas en las que sólo se consumen bebidas son una señal temprana de compromiso o, lo que es peor, de vulgaridad y mezquindad.
· Sé indiferente
Si quieres capturar a un hombre, apuesta fuerte. Exuda desafío, provocación, indiferencia, en lugar de comprometerte fácil y rápidamente. Deja que corran los rumores de lo difícil que es robarte un beso. Las mujeres de hoy, que a menudo se quejan de que sus citas tienen una abundancia de compañeras sexuales, deberían prestar especial atención y hacer caso. No suspendas ese viaje que tienes planeado por el hecho de que él te ha declarado su amor. Y una vez que regreses, él estará esperándote en el aeropuerto, con un hermoso ramo de flores y un costoso anillo de oro.
· Hazlo el centro de tu universo (al menos hasta que llegue el postre)
Siempre muestra fascinación por el hombre con el que estás. Nunca luzcas aburrida, nunca mires por sobre sus hombros, y procura siempre hacerlo sentir “incómodo” con tus preguntas y comentarios inagotables. El costado beneficioso, y tal vez lo verdaderamente importante, es que esta táctica te permite permanecer como una mujer enigmática al no hacer demasiadas declaraciones sobre tu persona. Y créeme que son pocos los hombres que pueden resistir a los encantos de un poderoso enigma. Una mujer debe saber resguardar ciertos aspectos de su privacidad, a la vez que debe adoptar un estilo inquisidor y ofensivo en su forma de interrogar.
· Cuando tres sean muchos, busca ser cuatro
Recuérdale a ese hombre rapaz que él no es el único con conexiones amorosas fuera de la pareja.
· Posiciónate favorablemente con el miembro más importante del reino
Muchas mujeres intentan ganar el amor de la madre del candidato y, al mismo tiempo, pasan por alto la importancia del padre (o suegro) dentro del ecosistema familiar. Si un anillo es tu objetivo, deja que tu querido suegro conozca tu equipo de fútbol favorito, el auto de tus sueños, tu marca de licor más preciada, y los hobbies que te fascinan. Lleva artículos periodísticos y tickets recortados en tu billetera si es necesario (necesitas acreditar tus gustos). Y, por sobre todas las cosas, permítete flirtear un poco con el Rey.
· Nada ha terminado hasta el altar
Mantén tus opciones abiertas hasta el momento de llegar al compromiso. ¿Es éste el comportamiento de una buena chica? Posiblemente, no. Pero se trata de seguir tus instintos. El compromiso es un plan exquisito, pero aun así está sujeto a cambios si ocurriera que encuentras un compañero más “pertinente”. El verdadero baile, querida, comienza en la fiesta de recepción.
No hay comentarios:
Publicar un comentario